La felicidad

Es el combustible para un mayor disfrute de la vidaLa necesidad de ser felices, es lo que nos hace levantarnos día con día, es lo que nos hace ir al trabajo, buscar a los amigos, encontrar maneras de disfrutar todo lo que el mundo tiene que ofrecer.

En nuestro día, planeamos o proyectamos y/o buscamos maneras de experimentar y saborear las diferentes caras que la felicidad puede traer, por ejemplo: el gozo que hay cuando jugamos con nuestras mascotas, la alegría de estar con los amigos, el entusiasmo por irnos de vacaciones, la pasión por comer, la entrega total hacia la creación de un nuevo proyecto, la viveza del momento cuando estamos haciendo deporte, la creatividad que surge cuando estamos pintando o tocando un instrumento, la alegría cuando recibimos un regalo, la tranquilidad de estar solos en casa descansando después de un largo día, etcétera.

 

Cuando estas cualidades son experimentadas regularmente uno se siente pleno, fuerte, inspirado, armonizado, pleno, dispuesto, abierto, apasionado, creativo, audaz y otras más.


El beneficio de vivir la vida con estas cualidades es inmenso, ya que trae consigo la llave a un potencial mayor , salud, abundancia, conexión, bienestar, inspiración, creatividad, armonía, amor, … en comparación de cuando vivimos en el otro lado del espectro de estas emociones, como la tristeza, el enojo, la frustración, la desesperación, la ansiedad, el miedo, el rencor, la soledad, etcétera.

Como se dijo anteriormente, cuando uno es feliz, todo en nuestro alrededor adquiere un matiz diferente, todo cobra mayor sentido y todo se vuelve vivo y es como si hubiera un deleite en nuestra experiencia que avivara nuestros sentidos.

La situación es que la mayoría del tiempo, buscamos que ciertas circunstancias se den o que ciertas situaciones se vean de cierta manera, para que nosotros podamos experimentar eso que buscamos en un objeto o circunstancia en particular.

Creemos que el objeto o la situación son la fuente de nuestra felicidad, te preguntarás qué quiero decir con esto.

Más bien te preguntaría, ¿qué sucede si no obtienes lo que buscas (la felicidad, el amor, la tranquilidad, etc.) en las circunstancias o personas donde las andas buscando?

Lo normal en la mente de la gente es, que si no se da lo que quiero y como yo lo quiero entonces no podré ser feliz, o solo podré experimentar la felicidad, el gozo, el amor o la alegría mientras la situación de donde lo estoy obteniendo dure.

Cuántas veces nos hemos sentido defraudados porque nos íbamos a ir de vacaciones y por alguna u otra razón no pudimos ir, entonces nos sentimos tristes.

Cuantas veces creímos que cierta persona era la fuente de nuestra alegría o del amor, para que por alguna circunstancia ésta tomara otro camino y nos sintamos abandonados y rechazados.

Cuántas veces nos hemos enfermado y nos hemos sentido enojados e impotentes, entonces nuestro cuerpo se contrae al ver que no podemos hacer deporte o no podemos viajar con la familia por la limitante física por el cual estamos atravesando.

Estos son nada más algunos ejemplos generales, pero estoy seguro que podrás encontrar algunos que van más acorde a tus circunstancias.

Situaciones

Entonces nos encontramos con tres maneras de experimentar la felicidad, una es, felicidad por alguna razón negativa, ésta es cuando te vas con los amigos y bebes alcohol, tomas exageradamente, ésta situación impacta con estrés al cuerpo, podemos llegar a perder el conocimiento, pero eso sí, nos sentimos felices de estar alrededor de amigos y conocidos, diversión y alegría rondan nuestra experiencia.

La otra es, ser felices por alguna razón positiva, ya sea si estamos con seres queridos, haciendo deporte, nos fuimos de vacaciones, el dinero llega a tiempo, jugamos con nuestra mascota, etc. Esta felicidad es buena y tiene un mejor impacto en nosotros que las otras que acabo de mencionar.

Pero, ¿qué pasa con estas dos situaciones? Primero, nuestra felicidad está sujeta y condicionada a que éstas tienen que suceder, y si no suceden la felicidad que estamos buscando pareciera que su destino es no ser experimentada, por consiguiente buscamos muchas fuentes de alegría y felicidad, para contrarrestar este efecto.

Otra razón es que éstas tienen un tiempo de vida limitado, ya que van y vienen, a veces están y otras veces no, a veces suceden y otras veces no. Algunas duran mucho y otras duran poco.

Así que si usemos un ejemplo, te darás cuenta que no podemos pasar todo el tiempo tomando alcohol (hacer ejercicio, trabajar, relaciones, …) creyendo que esa es la fuente donde podré ser feliz permanentemente (es por eso que existen las adicciones – buscar la felicidad o la tranquilidad en algo en particular), tampoco podemos estar con nuestro perro jugando día y noche, ya que necesitamos hacer otras cosas en nuestro día y resolver problemas en el trabajo, etcétera.

La mayoría de la gente vive solamente en estas dos opciones. ¿Te das cuenta que, estamos en un sube y baja de emociones?, experimentando constantemente un lado de la moneda para saltar al otro lado.

Al vivir de estas dos maneras, vivimos limitados, porque nos perdernos una manera muy diferente de experimentarnos a nosotros mismos y a la vida misma. Ya que éstas condicionan nuestra experiencia, limitan nuestro sentir y nos encierran en una percepción pequeña y limitada de nuestra relación con todo lo que hay.

Así que pasemos a una tercera opción, ésta es la clave a una vida, feliz, plena, completa, libre y constante, es ser feliz por ninguna razón o por ningún motivo.

Cuando eres feliz sin razones, sin motivos, sin condicionamiento, sin deseos, sin nada. Entonces podrás ser feliz siempre, ya que te darás cuenta que la felicidad es una experiencia subjetiva, o sea, que existe siempre dentro de ti, y que no tiene un objeto en particular donde está siendo experimentada.

Y qué sucede, que puedes experimentar la vida de una manera más pura, completa, incondicional, libre, sin ataduras, sin apegos, sin necesidades, sin controlar o tratar de manipular un resultado.

¿No te gustaría vivir una vida así?

Si es asi, entonce tienes que buscar vivir la tercera opción; la felicidad sin un motivo en particular. Ya que no quieres perderte lo increíble que la vida puede llegar a convertirse.

Así que te invito a que descubras esta manera de experimentar y ver la vida. Ábrete a la simplicidad, a la inocencia y a la libertad de ser y estar. Sin ataduras y sin necesidades.

Recuerda que si te lo permites, descubrirás que de hecho tú eres felicidad, tú eres tranquilidad y qué dentro de ti mora el combustible y el fuego que alimentan la vida.

~Sarkhan